El Pentágono ha informado de esta solicitud, planteada por Hussein en una conversación telefónica, y ha dicho que Hagel "estudia la disponibilidad y utilidad" de esta tecnología militar para la tarea. El secretario de Defensa norteamericano ha prometido que dará una respuesta a Malasia "en un futuro muy cercano".
Estados Unidos contribuyó inicialmente a la búsqueda con el despliegue de dos buques y, ahora, mantiene desplegados en la región dos aviones espía, incluido un P-8A Poseidon diseñado específicamente para localizar submarinos.
Un portavoz del Pentágono, coronel Steven Warren, ha informado de que hasta ahora esta colaboración ha costado 2,5 de los 4 millones de dólares que Estados Unidos autorizó para estas actividades. El dinero, si no se añaden nuevos equipos, sería suficiente en principio para cubrir las operacines hasta "principios de abril".
No obstante, otro portavoz del Departamento de Defensa norteamericano, John Kirby, ya dijo el jueves que el Gobierno no contempla un límite para su ayuda. "Vamos a seguir mientras Malasia necesite nuestra ayuda", declaró.
La Marina norteamericana tiene un sistema de escuchas llamado 'Towed Pinger Locator' que, remolcado por un barco, permite localizar artefactos hundidos a una profundidad de hasta 6.000 metros.