"Han sido condenados bajo el Acta de Inmigración, no por cargos por tráfico de personas. Se han declarado culpables, pero aún deben de hacer frente a los cargos por tráfico de personas", ha dicho el fiscal Aung Kyaw Nyunt
Las autoridades birmanas determinaron tras interceptar el barco que un total de los 200 pasajeros eran bangladeshíes y fueron posteriormente repatriados. Los otros ocho eran miembros de la minoría musulmana rohingya residentes en Birmania, cuya situación no ha sido aclarada.
Miles de emigrantes, la mayoría procedentes de Birmania y Bangladesh, han llegado a Malasia e Indonesia en barcos en los últimos meses, después de las operaciones de las fuerzas de seguridad contra la inmigración en Tailandia.
Los inmigrantes que viajaban a la deriva son principalmente musulmanes rohingyas de Birmania y bangladeshíes que han huido de la persecución y la pobreza que sufren en sus países.
Birmania achaca esta crisis humanitaria al tráfico de personas y a las redes de contrabando y ha negado categóricamente que sus políticas exclusionistas hacia la comunidad rohingya tenga relación alguna con su salida masiva del país.