Johnson se estrella contra el no del Parlamento a aprobar un 'brexit' por la vía de urgencia

  • Pierde otra votación clave en el Parlamento y ahora todo depende de que la UE conceda otro aplazamiento

Boris Johnson se desinfla y su plan exprés para aprobar el Brexit ha chocado con la oposición del Parlamento. Su imagen, de regreso a Downing Street tras el debate en Westminster, Johnson transmitía su fracaso. Los parlamentario se lo han dicho claramente: Quieren un 'Brexit', pero con acuerdo, no que se tramite sin apenas tiempo para analizarlo, como reclamaba el Ejecutivo.

A Boris Johnson no le ha quedado otra que "poner en pausa" la tramitación de la ley, a pesar de sus prisas y de ese impulso irracional que parece mover al primer ministro cuando prometió lo imposible. Desde la oposición Jeremy Corbyn le espetaba: "El primer ministro es el autor de su propia desgracia". Johnson ha anunciado su siguiente paso, hablará con los Estados miembros de la UE sobre sus intenciones hasta conocer la respuesta a la prórroga solicitada.

El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, no quiere perder más tiempo y ha respondido en Twitter que recomendará a los líderes europeos que acepten un nuevo aplazamiento del 'Brexit' por "procedimiento escrito", es decir, sin necesidad de una cumbre.

El primer ministro británico tendrá que asumir que Reino Unido no dejará el bloque el próximo día 31, a pesar de que llegó a decir que lo haría a vida o muerte. El ultraderechista Nigel Farage ha tirado de sarcasmo. "Se acabó, hemos muerto en una zanja. No nos iremos de la Unión Europea el 31 de octubre", ha publicado en las redes.

Johnson deberá resignarse a la idea de un trámite parlamentario de su 'Brexit' con tiempo suficiente y que no se trata de voluntarismo. Las leyes y la democracia impone normas que cumplir.