"El desembolso de hoy para Túnez es una prueba de nuestro fuerte compromiso con apoyar la recuperación económica exitosa de uno de nuestros vecinos más cercanos", ha explicado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici.
Los 300 millones de euros restantes del préstamo se desembolsarán en dos tramos de 150 millones en 2018 a condición de que Túnez cumpla una serie de condiciones para mejorar la consolidación fiscal, los servicios sociales y el clima inversor.
Los Gobiernos y la Eurocámara acordaron en julio de 2016 el nuevo préstamo para Túnez para ayudar al país a superar sus dificultades económicas, entre otros por el impacto de los atentados terroristas en 2015 en el sector turístico y seguir ayudando al país a consolidar su transición democrática a raíz de la revolución de la Primavera árabe en 2011, que la UE ve como un modelo para la región.
La UE ya acordó un primer préstamo de 300 millones de euros para Túnez en 2014.