Cientos de egipcios bloquean una carretera contra la liberación de policías

EUROPA PRESS 05/07/2011 08:52

Familiares de los egipcios que murieron en las revueltas previas al derrocamiento del ex presidente Hosni Mubarak han bloqueado una carretera principal este lunes, después de que un tribunal liberara a agentes de Policía que estaban siendo juzgados por estos casos.

En un incidente aislado, fuentes de seguridad informan de la muerte de un joven de 14 años una vez que la Policía disparó con fuego real y gas lacrimógeno contra una multitud que, ante las puertas de la Comisaría, pedía la liberación de familiares de manifestantes. La misma fuente apunta a que algunas de las personas iban armadas.

La manifestación ocurrió en la carretera que une la ciudad de Suez con El Cairo y congregó a unas 300 personas, según testigos de Reuters. "Las familias están determinadas a continuar bloqueando la carretera tal y como han hecho durante cuatro horas", dijo el activista Islam Nasser.

"Hay alguna pequeña fricción entre las familias y la Policía militar que está intentando abrir la carretera para mitigar el atasco", prosigue. No se tienen informaciones de heridos.

En total son diez los policías liberados, a los que se suma un empresario. Han quedado en libertad bajo fianza hasta la próxima vista, convocada para septiembre. Están acusados de asesinar a varias personas durante las manifestaciones previas a la marcha de Mubarak, el 11 de febrero.

Entre ellos figura el ex jefe de Policía de la ciudad de Suez. Fuentes de seguridad afirman que la Fiscalía ha recurrido la decisión de liberar a los agentes de Policía.

La semana pasada, en El Cairo, más de un millar de personas resultaron heridas en enfrentamientos desencadenados por jóvenes que lanzaban piedras. Estas refriegas comenzaron cuando familiares de algunas de las más de 800 personas muertas durante el levantamiento celebraron un acto en su honor en un barrio de la capital.

El ex ministro del Interior Habib al Adli ha sido encarcelado por corrupción y además se enfrenta junto a otros cargos públicos a acusaciones relacionadas con las muertes.