Las fuerzas sirias han matado este lunes a tres civiles en la ciudad de Hama (centro-oeste), en el marco del asalto llevado a cabo sobre la población. Los vecinos del lugar bloquearon las calles para evitar que los tanques del Ejército pudieran avanzar, según relatan algunos residentes. Los efectivos militares han asediado varias viviendas y han efectuado disparos indiscriminados.
De los tres civiles fallecidos, uno era un menor de 13 años de edad. Su cuerpo y el de un hombre fueron arrojados al río Orontes, tal y como señala un médico de la ciudad. Otro facultativo había señalado horas antes: "las fuerzas de seguridad están disparando de forma indiscriminada a los edificios", y apuntó que siete personas heridas habían llegado al hospital de Horani, al tiempo que varios residentes estaban siendo tratados en una clínica.
El Observatorio para los Derechos Humanos sirio, que recoge el testimonio de vecinos, había informado de que los tanques rodearon Hama una vez cientos de tropas y agentes de Policía entraron en autobuses durante el amanecer.
Varios grupos pro Derechos Humanos han sostenido que al menos 1.300 civiles han muerto durante la represión que ya dura catorce semanas y más de 12.000 personas han sido arrestadas por las fuerzas de seguridad. Mientras, las autoridades han aseverado que 500 policías y soldados han perdido la vida en ataques perpetrados por hombres armados.