El ministro de Exteriores sirio, Walid al Moallem, ha subrayado que la participación de Damasco en la reunión "no será para entregar el poder", tal y como solicita la coalición como condición para acudir a Ginebra.
"Para Al Assad, es una oportunidad para traer más destrucción y conseguir nuevos avances sobre el terreno", ha indicado la organización opositora a través de un comunicado, en el que ha reiterado su compromiso con una solución política "que ponga fin al derramamiento de sangre y lleve hacia una Siria democrática".
Asimismo, ha apuntado "la importancia de excluir de la reunión de Ginebra a Al Assad y a todos los que le rodean que son responsables de crímenes contra el pueblo sirio".
Respecto al desmentido de Al Moallem sobre la posesión de armamento químico por parte de las autoridades, la CNFORS ha manifestado que "esta negativa llega en medio de montones de vídeos, informes, testimonios y afirmaciones de gobiernos extranjeros sobre el uso de armamento químico contra civiles".
En este sentido, ha denunciado además que el Ejército ha atacado con estas armas la localidad de Zamalka, ubicada en los alrededores de Damasco, matando a al menos cuatro personas. Además, ha denunciado la ejecución de 50 civiles en la localidad de Mazraa, ubicada en la provincia de Aleppo, y de otros 18 en la ciudad de Duma.