Un tribunal de la localidad de Estambul ha condenado a cadena perpetua a 18 miembros de dicha organización --a la que el Gobierno llama FETO y tilda de terrorista-- por haber tratado de hacerse con la oficina de las unidades antidisturbios de la Policía del distrito estambuleño de Bayrampasa durante la intentona golpista.
Algunos de los acusados, que se encontraban bajo custodia policial a la espera de ser juzgados, han sido condenados por "vulnerar la Constitución" mientras que otros tres han sido señalados como responsables de la muerte de una persona.
Entre los 46 condenados se encuentran ingenieros y miembros de las fuerzas de seguridad. Un segundo tribunal --de la provincia de Sakarya-- ha condenado a 29 exagentes de la Policía a penas de entre cuatro y seis años de cárcel, según ha informado la agencia de noticias Anatolia.
En la provincia de Adana, en el sur del país, otros once expolicías tendrán que enfrentarse a penas de entre uno y nueve años de prisión.
Más de 50.000 personas han sido detenidas y unos 150.000 empleados públicos --militares, policías, jueces, fiscales, periodistas y profesores-- han sido destituidos por su presunto vínculo con Gulen tras la intentona golpista.