La Justicia estadounidense ha condenado en Massachusetts a dos cadenas perpetuas al adolescente Matthew Borges, de 18 años, por decapitar a un compañero de clase en 2016. La jueza Helene Kazanjian ha dictado esta sentencia después de que un jurado le declarara culpable de asesinato en primer grado hace dos meses.
No obstante, el condenado, que tuvo una expresión fría durante todo el juicio, podrá solicitar la libertad condicional dentro de 30 años, según informa CNN. Durante una de las vistas, la Fiscalía aseguró que cometió el crimen porque la víctima, de 16 años, pasó tiempo con su novia. Instantes después le engañó y asesinó.
"No existe ninguna sentencia que pueda imponer que traiga de vuelta al fallecido, o que responda las preguntas que todos tenemos sobre cómo sucedió y cómo un niño de 15 años podría matar a un amigo de esta manera", expresó Kazanjian.
Las autoridades encontraron el cadáver decapitado y con las manos amputadas en la orilla del río Marremack, en diciembre de 2016. Tras la autopsia, los forenses hallaron hasta 76 heridas en el cuerpo de la víctima.