El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha dicho este viernes cuales son sus máximas prioridades después de haber sido reelegido para su cargo, entre ellas ha destacado el desarrollo sostenible y ha explicado que los desafíos principales incluyen el logro de los objetivos globales de reducción de la pobreza y el fortalecimiento de la reducción del riesgo de desastres para evitar las crisis causadas por el cambio climático.
La Asamblea General acordó, en junio, renombrar por segundo mandato consecutivo a Ban como secretario general. "Desde mi reelección, he hecho una amplia consulta a los Estados miembros y a la gran mayoría de los socios de la ONU sobre lo que ven como los grandes retos de futuro", ha dicho Ban a los miembros del cuerpo diplomático en Seúl y ha agregado: "Mirando hacia el horizonte más amplio, el desarrollo sostenible está en la cima de mi lista de prioridades".
El secretario general ha señalado que la seguridad mundial y regional y los desafíos de democratización también ocupan un lugar destacado en su agenda. "Estamos apoyando a las transiciones que se están realizando en Egipto y Túnez, y estamos profundamente involucrados en los esfuerzos diplomáticos encaminados a una solución al conflicto en Libia".
Sin embargo, su preocupación más inmediata es la crisis humanitaria provocada por la grave sequía en el Cuerno de África, que ha llevado a la hambruna a varias zonas de Somalia, donde se estima que hay 12,4 millones de personas que dependen de la ayuda alimentaria.
"Al responder a esta emergencia, también es necesario para hacer frente a las causas subyacentes. La sequía actual puede ser la peor en décadas, pero con los efectos del cambio climático se nota cada vez más en todo el mundo, seguramente no será la última" , ha declarado Ban y ha añadido que hacen falta soluciones a largo plazo que requerirán el desarrollo de semillas resistentes a la sequía, el riego, infraestructura rural y programas ganaderos.
Ban también ha hecho hincapié en que en una época de restricciones presupuestarias, la ONU debe continuar cumpliendo sus mandatos con los recursos disponibles. "Eso significa continuar con nuestros esfuerzos para trabajar al unísono"
HAMBRE EN COREA DEL NORTE
Ha hecho referencia asimismo a la escasez de alimentos en Corea del Norte donde, el duro invierno y las graves inundaciones han puesto en riesgo millones de vidas y el Programa Mundial de Alimentos (PAM) ha puesto en marcha las operaciones de emergencia. "Nuestro desafío es llevar alimentos a quienes lo necesitan, cuando lo necesitan", ha aclarado Ban, de origen surcoreano.
Ban ha destacado que el desafío más amplio en la península coreana es la democracia y prosperidad y librarla de armas nucleares. El secretario general ha tomado nota de la creciente presencia de Corea del Sur en el ámbito internacional, incluyendo la celebración de la última reunión del G20, su apoyo para el desarrollo africano y el compromiso de mantenimiento de la paz de la ONU, entre otras iniciativas.
Ha priorizado también la importancia de las alianzas para las causas más comunes entre gobiernos, organizaciones no gubernamentales (ONG), el sector privado, los filántropos y la comunidad académica mundial.
"Vimos un claro ejemplo de esto en la iniciativa 'Estrategia Mundial de Salud de Mujeres y Niños'. Hay que extender este modelo a otros desafíos ", dijo el secretario general.
Ban aprovechó la ocasión para reunirse con el ministro de Asuntos Exteriores surcoreano, Kim Sung Hwan, y asistió a un evento organizado por la Cruz Roja y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) para apoyar a los niños en África. Agradeció a los jóvenes coreanos presentes que respaldaran el proyecto y les pidió que utilizaran su alcance para recaudar fondos y crear conciencia.
"Muchas personas están sufriendo y muriendo de VIH y la tuberculosis, estas son enfermedades que pueden prevenirse", ha dicho Ban incidiendo en lo siguiente: "Si tienen la medicina, si tienen acceso a servicios de saneamiento, que puedan ser salvos."
"¿Por qué todas estas personas mueren innecesariamente? Por eso estamos aquí reunidos, les pido a todos su apoyo, su compasión, su cuidado de toda esa gente".
Además, el jefe de la ONU se ha reunido con el arzobispo católico de Seúl, el cardenal Chung Jin Suk. Hablaron de cómo la religión puede ayudar a promover el trabajo de la ONU, incluyendo en los campos de paz y seguridad, el desarrollo y los Derechos Humanos.