La fuente, citada por la agencia afgana AIP, situó en 12 el número de víctimas mortales, aunque el jefe del consejo provincial, Muhamad Akrman Khan, dijo no poder ofrecer una cifra y se limitó a señalar que las primeras informaciones apuntan a que el jefe del distrito de Koshtipa, donde tuvo lugar el asalto, y un jefe policial murieron en la emboscada.
Un portavoz talibán, Zabihulá Mujahid, reivindicó el ataque y dijo a AIP que los insurgentes mataron a estos dos responsables regionales y a otros nueve policías.
Las provincias norteñas de Afganistán -excepto Kunduz- no acostumbran a ser escenario de combates, ya que la insurgencia talibán, que ataca con frecuencia a las fuerzas de seguridad y al funcionariado afgano, se concentra en las áreas meridionales y en menor medida en el este del país.