Después de estos comentarios, ha habido un llamamiento a boicotear sus apariciones ante los medios, por lo que Duterte, en una entrevista a la emisora TV5, ha dicho que ha decidido no volver a hablar con la prensa. "Lo siento, pero realmente voy a boicotear (a los medios)", ha afirmado.
"¿Hasta cuándo?", se le ha preguntado. "Hasta el final de mi mandato", ha confirmado. "Eso es. No quiero ser entrevistado. Si cometo un error, habrá muchas más críticas", ha afirmado, según declaraciones recogidas por el diario filipino 'Inquirer'.
"Así que así es mejor. Si no hay entrevistas, no hay críticas, no hay declaraciones erróneas, no hay nada. Me callo. De verdad que no lo necesito", ha añadido.
La semana pasada, en respuesta a una pregunta sobre cómo abordaría el problema de los asesinatos de periodistas, Duterte aseguró que "sólo porque uno sea periodista no está exento de ser asesinado".
Reporteros Sin Fronteras (RSF) instó a los periodistas que cubren al presidente electo a no asistir a sus ruedas de prensa en signo de protesta "hasta que ofrezca una disculpa pública a la comunidad mediática" del país.
En lugar de eso, Duterte ha preferido lanzar su propio boicot. "Adelante, boicoteadme. Os lo pido: haced de este vuestro último viaje a Dávao. No me importa si nadie me cubre", ha continuado.