Si bien el Ejército surcoreano cree que todavía no hay indicios que respalden la posibilidad de que la prueba sea inminente "se han detectado constantes movimientos entre las bases militares norcoreanas y sus instalaciones de misiles", según fuentes militares a la agencia oficial de noticias surcoreana, Yonhap.
Así, las fuerzas conjuntas de EEUU y Corea del Sur han acelerado las operaciones de aviones como el U-2S, capacitado para tomar fotos a la altura de satélites, así como aviones de reconocimiento RC-800 y RF-16, aviones de alerta temprana E-737 y patrullas P-3C
Todo ello por las declaraciones formuladas esta semana por el diputado ruso Anton Morozov, quien anunció tras una visita a Corea del Norte que el Ejército norcoreano podría ensayar en próximas fechas un misil capacitado para alcanzar Estados Unidos, coincidiendo con el aniversario del Partido de los Trabajadores de Corea (el partido único de Gobierno), el 10 de octubre, o el 18 de ese mismo mes, coincidiendo con el Congreso Nacional del Partido Comunista chino.