El Gobierno de Estados Unidos ha afirmado que la decisión sobre si el ex espía libio Abdelbaset Alí Mohamed al Megrahi, condenado en Reino Unido por el atentado de Lockerbie de 1988, en el que murieron 270 personas, debe volver a la cárcel depende de los rebeldes.
Al Megrahi se encuentra en Trípoli al cuidado de su familia, según la cual se encuentra "al borde de la muerte". Al parecer, la mayoría del tiempo se encuentra en estado comatoso, conectado a una bombona de oxígeno y alimentado con suero vía intravenosa.
Las autoridades escocesas decidieron en 2009 ponerle en libertad por motivos humanitarios, ya que padecía un cáncer que le auguraba una esperanza de vida de unos tres meses. Sin embargo, Al Megrahi vivía holgadamente en Trípoli rodeado de fuertes medidas de seguridad hasta la semana pasada, cuando los rebeldes entraron en la capital.
"La secretaria de Estado (Hillary) Clinton lo ha dejado claro, creemos que (AL Megrahi) debería estar en la cárcel. La decisión de liberarle no fue la correcta", ha dicho la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland. En cualquier caso, ha agregado que la decisión ahora queda en manos del Consejo Nacional de Transición libio (CNT).
"Tenemos que dejarles que tomen sus decisiones como autoridad gubernamental, y se han mostrado de acuerdo en tomar cartas en el asunto", ha dicho Nuland. "Les hemos pedido (al CNT) que, tan pronto como pueda, estudien qué se debe hacer con Al Megrahi, algo a lo que se han comprometido", ha agregado, según recoge en canal de televisión estadounidense CNN.
"Es un nuevo día en Libia. Es un hombre (Al Megrahi) con sangre en sus manos, de vidas inocentes. La misma Libia bajo el régimen de (Muamar) Gadafi hizo un héroe de él", ha señalado Nuland. "Presumiblemente, una nueva y democrática Libia tendrá una actitud diferente hacia un terrorista convicto", ha añadido.
Horas antes, el CNT indicó que no habrá una decisión en firme sobre el futuro de Al Megrahi hasta que se elija al nuevo Gobierno. En este sentido, el ministro de Justicia del CNT, Mohamed al Alagi manifestó que los rebeldes no permitirán la extradición. "No vamos a entregar a ningún ciudadano libio a Occidente", reseñó.
El presidente del CNT, Mahmud Jibil, matizó estas declaraciones. "A lo que Alagi se refería era al aspecto legal. No estaba hablando de una política o una posición del CNT. Hay una mala interpretación del comunicado hecho por Alagi", señaló.
"Alagi no puede hacer un comunicado de carácter político en nombre del CNT o de la población libia", agregó Jibril. "Esto dependerá de lo que el pueblo libio decida en el futuro. El CNT es un cuerpo interino y no puede tomar decisiones sobre asuntos vitales", apostilló.