Manning, que fue condenada a 35 años de cárcel por haber filtrado miles de documentos clasificados al portal Wikileaks --aunque podría obtener la libertad condicional en siete años--, ha recibido el visto bueno a la petición que hizo hace varios meses, en un mensaje firmado por la coronel Erica Nelson, que se encuentra al mando de la prisión, según ha informado el diario 'USA Today'.
En agosto de 2013 Manning aseguró sentirse como una mujer y pidió que desde ese momento se le llamase "Chelsea". "Soy Chelsea Manning. Soy una mujer", afirmó en un comunicado, antes de señalar quería comenzar "una terapia hormonal tan pronto como sea posible". "Espero que me apoyéis en esta transición", sentenciaba la nota.