Embajador japonés en España dice que saldrán de la crisis

EUROPA PRESS 21/06/2011 10:06

El embajador de Japón en España, Fumiaki Takahashi, ha asegurado este martes que su país saldrá de la actual crisis en la que está sumido, tras el terremoto y posterior tsunami del pasado 11 de marzo que afectó a la central nuclear Fukushima-1, con "todos los japoneses unidos" y ha minimizado los efectos de la radioactividad fuera de la zona de exclusión alrededor de la planta ya que no suponen una "preocupación excesiva".

En un desayuno informativo de Fórum Europa en Madrid, Takahashi también mencionó las relaciones actuales entre Japón y China, entre los que existen algunos "problemas", que deben resolverse de "forma pacífica" para promover un intercambio entre ambas naciones por "la estabilidad de la región".

"Japón llegará sin duda a reconstruir el país con todos los japoneses unidos", aseguró el embajador, que defendió la creación de una nueva sociedad "con vistas al futuro", capaz de resistir las catástrofes naturales, vivir en consonancia con el medio ambiente y respetando a los más débiles.

Takahashi explicó que el Gobierno japonés ha creado la Asamblea para la Reconstrucción del Este de Japón, en la que una serie de expertos de la sociedad civil realizarán un borrador, que se presentará a principios de julio, con recomendaciones para la reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto y posterior tsunami. "Se debe escuchar también a las víctimas y a todos los ciudadanos del país", comentó.

Sobre el fallo en la central nuclear de Fukushima-1, el embajador quiso hacer una distinción entre este y la crisis nuclear desatada en Chernóbil (Ucrania) en 1986, a pesar de que ambos tengan el mismo nivel en al escala internacional de accidentes nucleares.

Takahashi señaló que Fukushima-1 solo ha liberado una sexta parte de la radioactividad de Chernóbil y que los niveles de radiación fuera de la zona de exclusión, que abarca un área con un radio de 20 kilómetros alrededor de la central, están muy lejos de suponer una "preocupación excesiva".

Además, quiso negar los rumores sobre la contaminación de los productos japoneses, a los que se aplican controles más exhaustivos, y que la radiación se haya extendido a otras zonas fuera de ese radio de exclusión, ya que estas informaciones están afectado negativamente a su economía y al turismo de extranjeros. "Los niveles de radioactividad (fuera de la zona de exclusión) no revisten ningún peligro y todos los puertos y aeropuertos son seguros", señaló.

El embajador señaló que la economía de Japón crecerá un 0,8 por ciento del PIB en 2011, lo que supone una bajada de medio punto según sus últimos cálculos, actualizados tras la catástrofe. Las zonas afectadas por el terremoto y el tsunami solo suponen un 3 por ciento del PIB del país, según el embajador.

"Para finales de verano, la economía crecerá", señaló Takahashi. "Tras el gran terremoto de Kobe de 1995 la producción industrial de la zona afectada ya había recuperado la etapa total de crecimiento en solo dos años", indicó.

CHINA

Por otro lado, el embajador declaró que es importante que Japón y China mantengan una "relación de amistad y de cooperación". "Creo que nuestros dos gobiernos reconocen la importancia de nuestras relaciones", indicó.

"Desde el primer momento, Japón ha ayudado a nivel gubernamental y empresarial al desarrollo económico y social de China para asegurar el nivel de vida de los ciudadanos que dé estabilidad" al país, comentó.

Takahashi reconoció que existen "problemas" entre ambos países que deben resolverse "de forma pacífica", ya que el "el intercambio entre ambos países es necesario para la estabilidad de la región".