"La comunidad internacional debe asumir su responsabilidad histórica y dar pasos inmediatos para remediar las décadas de ocupación, colonialismo y exilio", ha manifestado, recalcando que "Reino Unido en particular debe cerrar la oscuridad de su pasado colonialista en la región".
"Hace 98 años, el destino de nuestra nación cambió debido a la acción de una potencia colonial extranjera. La Declaración Balfour debe servir como recordatorio de que lo que está pasando en Palestina es un resultado de las decisiones colonialistas tomadas por capitales lejanas", ha valorado.
Así, Erekat ha subrayado que "Balfour, en nombre de Reino Unido, prometió Palestina, un país sobre el que Reino Unido no tenía derechos legales, a otro pueblo", en referencia a Israel.
"De 85.000 judíos en Palestina (cerca del doce por ciento de la población), pocos de ellos eran sionista, y la declaración fue rechazada incluso por el único miembro judío del gabinete británico de la época, lord Montagu", ha recordado.
"En 1917, los palestinos rechazaron la Declaración Balfur, dejando claro que el problema no era con los judíos que vivían en Palestina, sino con la transformación de un país árabe predominantemente cristiano y musulmán, a un estado exclusivamente judío", ha remachado.
La declaración fue una manifestación formal del Gobierno británico a favor de la creación de un hogar judío en Palestina, en una carta enviada por Balfour, entonces secretario de Exteriores, al barón Lionel Walter Rothschild, líder de la comunidad judía en Reino Unido.