La Eurocámara autoriza a abrir negociaciones con los Gobiernos para ayudas al sector de la defensa
EUROPA PRESS
13/03/201817:00 h.El objetivo del programa es incentivar la cooperación entre países para desarrollar capacidades de defensa críticas y contribuir a "la autonomía estratégica" de acción de la Unión Europea, aunque desde la Izquierda Unitaria Europea han recalcado su rechazo a la utilización de fondos europeos para subsidiar la industria del armamento.
"Estamos firmemente en contra de cualquier intento de utilizar dinero del presupuesto de la UE y programas de la UE como (el de ayudas a la investigación) Horizonte 2020 para subsidiar el sector de la defensa y el complejo militar industrial", ha subrayado el eurodiputado chipriota Neoklis Sylikiotis tras la votación en pleno.
El programa cubrirá la fase de desarrollo de los proyectos, desde estudios de viabilidad, el diseño de un producto, prototipos industriales, ensayos de prueba y la cualificación y certificación de un producto, pero en ningún caso cubrirá la producción ni la adquisición de equipos y tecnologías, que seguirá corriendo a cargo de los Gobiernos.
Los eurodiputados han reclamado eso sí excluir el apoyo a proyectos relacionados con las armas de destrucción masiva, armas y municiones prohibidas, explosivos y armas plenamente autónomas de ataque sin control humano.
La Eurocámara también exige que sólo puedan optar a ayudas proyectos de consorcios en los que participen al menos tres compañías, públicas o privadas, de tres Estados miembro diferentes y que ni estas ni las subcontratistas estén controlados por entidades fuera de la UE.
Los Veintiocho, que acordaron su posición negociadora en diciembre, han planteado que participen consorcios de al menos tres empresas establecidas "como mínimo" en dos países diferentes de la UE y que las empresas beneficiadas y sus subcontratistas no estén "sujetos a control por parte de terceros países ni de entidades de terceros países". No obstante, abrieron la puerta a admitir a empresas controladas por países o empresas de fuera de la UE "de no haber sustitutos competitivos disponibles inmediatamente en la UE" y si hay "garantías suficientes" de que no irá en contra de los intereses de seguridad y defensa de la Unión.
El programa de ayudas cubrirá la totalidad del coste de los proyectos, con la excepción del desarrollo de prototipos, donde se cubrirá un máximo del 20% del coste.
También respaldan que los proyectos desarrollados en el marco de la Cooperación Permanente Estructurada en Defensa (PESCO) reciban un 10% adicional de cofinanciación y abren la puerta a financiación "adicional" bajo ciertas condiciones si se implican a pequeñas y medianas empresas.
Los eurodiputados también han reclamado que expertos independientes de la UE del máximo número de países posible asesoren a la Comisión Europa a la hora de conceder las ayudas a la industria de la defensa europea para proyectos específicos, que supone un hito en la UE porque nunca antes se ha acordado presupuesto comunitario para equipos de defensa.
La duplicación de equipos, solapamientos y las barreras a la contratación en el sector de la defensa provocan pérdidas de 26.400 millones de euros anuales en la actualidad, según cifras de la Eurocámara.
La Comisión Europea ha propuesto crear un Fondo Europeo de Defensa dotado de hasta 5.500 millones al año a partir del 2021 --en su mayoría con aportaciones voluntarias de los Estados miembro-- para incentivar proyectos conjuntos de investigación, desarrollo y adquisición conjuntos de capacidades militares entre los países de la UE, que contará con dos ventanillas, una para proyectos de investigación y otra para desarrollo de capacidades.
Bruselas planteó contribuir 500 millones en 2019 y 2020 para cofinanciar prototipos industriales a través del Fondo y elevarlos a 1.000 millones al año a partir de 2021, así como otros 90 millones para investigación en los próximos tres años y 500 millones anuales a partir de 2021.
La Comisión Europea ha saludado el visto bueno de la Eurocámara a la apertura de negociaciones del programa de ayudas al sector de la defensa y ha asegurado que trabajará con ambas partes a fin de llegar "lo antes posible" a un acuerdo. La idea es que los primeros proyectos puedan comenzar a financiarse en 2019.