El ministro de Defensa de Polonia, Antoni Macierewicz, ha confirmado que la bomba ha sido retirada por los artificieros y que será desactivada durante la jornada del lunes.
Macierewicz ha aplaudido los trabajos realizados en el lugar, agregando que la bomba suponía una "enorme amenaza" para los residentes, a los que ha agradecido su comprensión durante el proceso de evacuación.
El ministro ha señalado que el artefacto será trasladado a la localidad de Orzysz para proceder a su neutralización por parte del Ejército, según ha informado la agencia estatal polaca de noticias, PAP.
Macierewicz ha destacado además que las autoridades polacas desactivan anualmente decenas de miles de bombas lanzadas en la Segunda Guerra Mundial y que permenecen si estallar, describiendo la situación como "una amenaza constante a gran escala".