"La definición de delito que establece el proyecto puede provocar ambigüedades y confusión con relación a lo que el Estado puede considerar como un crimen terrorista, socavando potencialmente el ejercicio de los derechos humanos y las libertades fundamentales", añaden los expertos, a través de un comunicado que difunde el organismo internacional.
El controvertido proyecto fue aprobado el pasado 28 de octubre en el Senado del país sudamericano y se encuentra actualmente en la Cámara baja. Los relatores de la ONU insisten en que las definiciones "ambiguas o demasiado amplias" de terrorismo, pueden llevar en un futuro a "una mala utilización del término".
Por ello, reclaman a los legisladores brasileños que trabajen a favor de una ley que sea "lo suficientemente precisa para que cumpla con el principio de la legalidad".
De esta manera, los expertos de la ONU pretenden que se pueda evitar que se utilice "para atacar a la sociedad civil, silenciar a los defensores de Derechos Humanos, blogueros y periodistas, así como para penalizar las actividades pacíficas en defensa de los derechos de minorías, religiosos, laborales y políticos".