Del total de 'combatientes extranjeros' belgas, las autoridades creen que 269 individuos radicalizados siguen en Siria, otros seis están en tránsito y otros 59 lo han intentado, pero no lo lograron, de acuerdo a una respuesta parlamentaria escrita remitida esta semana por el ministro de Interior, Jan Jambon.
La mayoría de los sospechosos son originarios de la región de Bruselas (197 de ellos), aunque casi todos siguen en Siria y sólo 59 han vuelto a la capital belga. También hay una proporción importante de combatientes proceden de Amberes (105).
Sólo del distrito bruselense de Molenbeek-Saint-Jean --barrio en el que crecieron varios de los yihadistas implicados de los atentados de París del pasado 13 de noviembre y considerado foco de radicalización-- proceden 47 de los sospechosos identificados por Interior.