Los franceses se manifiestan contra la reforma de las pensiones de Sarkozy

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 07/09/2010 05:07

El retraso de la edad de jubilación, de los 60 a los 62 años, es la principal medida del plan gubernamental, caballo de batalla al que se oponen los sindicatos, que esperan que la de hoy sea "la mayor movilización de los últimos años" y que, por lo tanto, el Ejecutivo rectifique su política.

De momento, el Gobierno galo ha cifrado en 1.100.000 los manifestantes que se han echado a las calles hasta el momento. De ellos, 800.000 en París, donde se han visto a los líderes sindicales y líderes de la oposición política, de izquierdas, que cifran la protesta en dos millones y medio de personas.

Los sindicatos, que saben solo una gran movilización ciudadana podría frenar una reforma que se debate hoy en la Asamblea Nacional. "No seré un presidente más que me vaya sin haber solucionado el asunto" de las pensiones, aseguró el pasado viernes Sarkozy, sabedor de que esta espinosa cuestión hizo recular en el pasado a algunos de sus antecesores en el cargo.

Aunque según el Gobierno francés la huelga está teniendo más o menos el mismo seguimiento que la del pasado junio, sí ha destacado que en el sector público estatal ha atendio mayor éxito. Uno de cada cuatro trabajadores (el 24,7%) ha acudido a la huelga, que ha sido secundada también por el 16,2% de los empleados públicos regionales y por el 17,7% de los trabajados de los hospitales, porcentajes que superan los registrados en la anterior convocatoria de huelga. En Educación, el ministerio sitúa el número de trabajadores que han acudido a la huelga en el 29,3%.

Hasta ahora los sindicatos no han dado cifras del seguimiento.

Transportes y comunicaciones

En los transportes se esperaba una fuerte incidencia y así está siendo. La Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) había pedido a las compañías aéreas la supresión de la cuarta parte de los vuelos habitualmente programados en los dos aeropuertos de París, atendiendo a los controladores aéreos que se habían declarado en huelga.

Más de un centenar de vuelos han sido cancelados en España. Diversas compañías como Iberia, EasyJet, Vueling o Ryanair han suspendido sus conexiones con el país vecino desde esta pasada noche y hasta el míercoles a primera hora. La Sociedad Nacional de Ferrocarriles ha anulado todos los trenes de noche, lo que incluye los Talgo que comunican París con Madrid y Barcelona.

En los trenes franceses, solo están en servicio dos de cada cinco ferrocarriles de alta velocidad (TGV), uno de cada cuatro del resto de convoyes de largo recorrido o la mitad de los regionales. Los Eurostar que enlazan París con Londres son los únicos que se mantienen normalmente, mientras en los Thalys que comunican París con Bélgica, Holanda y Alemania, se han suspendido uno de cada cinco de los programados habitualmente, al igual que uno de cada diez de los Lyria que van de la capital francesa a Ginebra y Lausana (Suiza).

En París

En la capital francesa, el sistema de transporte urbano está algo menos alterado de lo que se temía inicialmente, con una circulación prácticamente normal en la mitad de las 14 líneas de metro. Los problemas son mucho más importantes en los cercanías. No hay casi ningún convoy en el corredor que atraviesa la ciudad de norte a sur y conecta con los dos aeropuertos.

Las alteraciones en el transporte público tienen un impacto directo en el tráfico rodado. En las carreteras y autopistas de la región de París se han llegado a contabilizabar 200 kilómetros de retenciones. BQM/EBP