Las víctimas, que quedaron atrapadas bajo los escombros a unos 15 metros de profundidad, han sido trasladados a centros hospitalarios cercanos para recibir tratamiento, según la agencia surcoreana de noticias, Yonhap. Debido a que algunos se encuentran en estado crítico, el balance de muertos podría ir ascendiendo según pasan las horas.
El accidente ha tenido lugar poco después de las siete de la mañana --hora local-- en la ciudad de Namyangju, al este de Seúl, cuando un total de 17 empleados estaban trabajando en la zona.
Testigos sostienen que vieron una gran explosión, pero la Policía --que investiga las causas junto con el cuerpo de Bomberos-- considera que no se ha utilizado ningún tipo de explosivo.