El Estadio de Francia fue uno de los escenarios del 13-N, una trágica noche en la que 130 personas murieron a manos de terroristas en distintos puntos de la capital gala. En la sala de conciertos Bataclán, 90 personas fueron asesinadas.
Los atentados coincidieron con un partido de fútbol entre las selecciones de Francia y Alemania al que asistía Hollande. El mandatario fue evacuado de forma precipitada tras una serie de explosiones junto al complejo en las que sólo murieron los tres terroristas.
Hollande volverá este sábado a ese simbólico lugar para presenciar el primer partido del Torneo de las Seis Naciones de Rugby, que enfrentará a los equipos de Francia e Italia, según han adelantado este viernes varios medios galos.