HRW denuncia que la coalición saudí atacó este miércoles con bombas de racimo en Saná

EUROPA PRESS 07/01/2016 14:06

En un informe, HRW ha dicho que todavía no se ha confirmado si hay víctimas civiles en estos ataques pero ha subrayado que suponen una violación de las leyes de guerra. "El uso deliberado o imprudente de bombas de racimo en zonas pobladas supone un crimen de guerra", had dicho.

"El uso repetido de bombas de racimo por parte de la coalición en ciudades llenas de personas sugiere un intento de herir a los civiles, lo que es un crimen de guerra", ha asegurado el director de Armas de HRW, Steve Goose. "Estos ataques son intolerables y demuestran que la coalición está menos preocupada que nunca por mantener a los civiles alejados de los horrores de la guerra", ha añadido.

La organización ha dicho que las bombas de racimo corresponden a las submuniciones del modelo de fabricación estadounidense BLU-63 y a componentes del CBU68. Las bombas tienen indicaciones que señalan que fueron fabricadas en 1978 en la Planta de Municiones Milan del Ejército del estado de Tennessee, en Estados Unidos.

Cada bomba CBU58 contiene 650 submuniciones. Según las investigaciones de HRW, Estados Unidos entregó 1.000 bombas CBU a Arabia Saudí entre 1970 y 1995. Por ello, la ONG ha considerado que Estados Unidos es "una de las partes" en confclito en Yemen, "con un papel director en la coordinación de las operaciones militares y, por tanto, está obligada a investigar las violaciones de las leyes de guerra en las que sus fuerzas toman parte".

"Hace 20 años que Estados Unidos suministró por última vez bombas de racimo a los saudíes y ahora ellos las están usando para matar civiles", ha denunciado Goose. "Estados Unidos, como parte del conflicto, debe pedir que la coalición deje de usar inmediatamente estas armas bajo riesgo de convertirse en cómplice de su uso", ha sostenido.

Según el informe, HRW documentó en 2015 el uso de tres tipos diferentes de bombas de racimo en Yemen por parte de la coalición y Amnistía Internacional denunció el uso de un cuarto tipo. "Estados Unidos tiene constancia de que Arabia Saudí ha usado bombas de racimo en Yemen", reveló a HRW un miembro del Departamento de Defensa de Estados Unidos, según ha informado la ONG.

"Ni Yemen ni Arabia Saudí ni ningún país de la coalición forma parte de la Convención contra las Bombas de Racimo de 2008, el tratado internacional que prohíbe el uso de este tipo de bombas", ha denunciado HRW, que preside la Coalición contra las Bombas de Racimo.

La organización también ha pedido a Estados Unidos, que aprobó el 17 de noviembre de 2015 la venta de armas de aire-tierra a Arabia Saudí por valor de 1.290 millones de dólares (1.190 millones de euros), que cancele esta venta ante la ausencia de investigaciones serias sobre las violaciones de las leyes de la guerra en Yemen.

HRW ha reclamado al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas el inicio de una investigación independiente e internacional ante estas supuestas violaciones de las leyes de la guerra por los dos bandos enfrentados en la guerra.