Los miles de documentos con información relativa a la política migratoria, a la seguridad nacional, a la comunicación, entre otros controvertidos temas se encontraban en el interior de muebles que alguna vez estuvieron en oficinas del Gobierno australiano, según ha publicado The Australian.
Los documentos contenían información de más de una década y abarcaban cuatro administraciones políticas diferentes.
El gobierno más reciente que aparece en los documentos es el del ex primer ministro Tony Abbott, reemplazado en 2015 por Malcolm Turnbull.
El primer ministro Turnbull se comprometió a lanzar una "investigación urgente" para aclarar cómo se perdió el mobiliario que contenía los archivos confidenciales.
La fuente de este verdadero tesoro comprado de forma accidental a precio de saldo ha puesto en jaque a los políticos australianos y a los expertos de seguridad.
Es una chatarra "bastante inquietante", dijo hoy el profesor John Blaxland, jefe del Centro de Estudios Estratégicos y de Defensa.
Este experto, además considera que lo ocurrido revela "el enfoque laxo a la seguridad que, algunos dirían, ha sido endémico durante algún tiempo. Es un recordatorio aleccionador de la necesidad de rendición de cuentas y responsabilidad".