Un investigador independiente designado por el Estado ha señalado este lunes que la negligencia del presidente chipriota, Demetris Christofias, llevó a la explosión en el depósito de municiones ocurrido en la isla el pasado mes de julio que desencadenó una crisis gubernamental y llevó a apuntarse a un posible rescate financiero de la UE.
Trece personas murieron el pasado 11 de julio en la explosión de municiones iraníes confiscadas almacenadas en una base naval en el sur del Chipre por las condiciones meteorológicas tras más de dos años.
El investigador Polys Polyviou ha señalado que Christofias y sus ministros de Defensa y Asuntos Exteriores, que dimitieron tras la explosión, son responsables de lo ocurrido. El presidente ha negado cualquier responsabilidad en los hechos.
"El presidente de la República en este caso no tomó las medidas elementales para la seguridad de los ciudadanos de Chipre", ha señalado Polyviou en rueda de prensa. "En este caso no me estoy refiriendo solo a responsabilidad institucional. En este caso veo una responsabilidad personal muy seria", ha añadido.
Sus conclusiones no son vinculantes, pero Polyviou ha considerado que es posible una investigación penal que analice las acciones de todos los implicados "sin excepción". Christofias goza de inmunidad en estos momentos.
"Soy de la opinión, especialmente en lo relativo a delitos penales, que el fiscal general debería examinar la posibilidad de que tales delitos se cometieran por todos los implicados sin excepción", ha subrayado.
Está previsto que mañana la Policía entregue su informe al fiscal general, quien entonces deberá decidir si presenta cargos. Las municiones habían sido confiscadas a un barco iraní que se dirigía a Siria a principios de 2009 por violación de las sanciones sobre armas impuestas por la ONU y según la investigación las autoridades habrían desoído repetidamente las advertencia de que la carga se estaba deteriorando.