Philippe Guillemet, comandante de la nave francesa "Pourquoi Pas", que coordina las búsquedas relacionadas con el siniestro en el Atlántico, también ha declarado a la emisora "Europa 1" que era falsa la noticia de que las cajas negras hayan sido localizadas.
"Se han detectado señales acústicas, pero no hay nada verificado, desgraciadamente", ha explicado a la emisora Guillemet.
"Le Monde" publica este martes, sin revelar sus fuentes, que el submarino articulado "Nautile" se sumergió el lunes para intentar recuperar las cajas negras, piezas clave en el esclarecimiento de las causas del accidente del avión que cayó al mar con 228 personas a bordo el 1 de junio.
"Las búsquedas se han vuelto complicadas", por el relieve submarino, cuyo fondo tiene cerca de 5.000 metros de profundidad, explica el diario, que subraya que las cajas negras "tienen aún autonomía para unos ocho días".
Mientras, las labores de búsqueda que llevan a cabo las autoridades brasileñas y francesas, han permitido recuperar hasta ahora 50 cuerpos, de los que se han identificado once.
El lunes, los médicos forenses brasileños recibieron el quincuagésimo cadáver rescatado del mar. Este cuerpo fue trasladado a Recife a bordo del navío tanque Almirante Gastao Motta, uno de los cinco barcos de la Marina brasileña que trabajan en la búsqueda y que también transportaba algunos de los restos del avión y equipajes rescatados.
En Recife, ciudad del nordeste de Brasil ubicada a cerca de 1.300 kilómetros del local en donde se supone que cayó el avión, fue establecido el comando de los equipos de búsqueda y de la fuerza operativa especial creada para identificar los cuerpos.
La búsqueda se realiza con aviones, helicópteros y navíos de Brasil, Francia y Senegal, además de un avión Fokker F-27 de la Fuerza Aérea española que se sumó el último miércoles. EPF
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