La justicia birmana condena a siete años de cárcel a un musulmán por intentar violar a una budista en Kanbalu

EUROPA PRESS 06/09/2013 03:34

El pasado 24 de agosto, Hsan Min Oo intentó violar a una mujer budista. El hombre fue detenido, pero rápidamente alrededor de un millar de budistas rodearon la comisaría donde estaba para exigir a la Policía que se lo entregara para ajusticiarle.

Ante la negativa de la Policía, los budistas --pertrechados con armas blancas y palos-- asaltaron la localidad de Htan Kone, perteneciente a Kanbalu, y atacaron las tiendas y viviendas de la comunidad musulmana, destruyendo una veintena.

En este contexto, la Policía, apoyada por el Ejército, tuvo que realizar varios disparos al aire para calmar a la multitud e imponer el orden público en Htan Kone. En total, 12 personas fueron detenidas, entre ellas diez budistas que aún están a la espera de juicio.

Los enfrentamientos entre las comunidades musulmana y budista en Birmania se reanudaron el año pasado en el estado de Rajine, en el norte, pero pronto se extendieron a otras ciudades, como Lashio, también en el norte, y Meiktila, en el centro.

Desde entonces, unas 200 personas han muerto y 140.000 --sobre todo musulmanas-- se han visto obligadas a abandonar sus hogares a causa de los enfrentamientos entre los dos grupos religiosos. Además, decenas de templos religiosos han sido destruidos.

Birmania, cuya población es mayoritariamente budista, no reconoce a los musulmanes 'rohingya' como una de sus 135 minorías étnicas, sino que sostiene que son inmigrantes bangladeshíes que entraron en el país de forma ilegal, por lo que --argumenta-- no merecen la ciudadanía.

La comunidad internacional ha instado al Gobierno de Thein Sein a abordar la marginalización de los 'rohingya', en el marco del proceso de reformas políticas y económicas que emprendió en marzo de 2011, cuando asumió el poder tras décadas de Junta Militar.