Lavrov defiende que las negociaciones de desnuclearización incluyan a todos los países con armas atómicas

EUROPA PRESS 22/06/2013 18:59

"Esto significa que aquellas propuestas para avanzar en la reducción real de armas ofensivas estratégicas deberán ser revisadas en un formato multilateral", ha declarado Lavrov en la cadena Rossia-1, según recoge la agencia oficial rusa RIA Novosti. "Y no sólo hablo de las potencias nucleares oficiales, sino de todos aquellos países que poseen armas nucleares", ha añadido.

Lavrov ha efectuado estas declaraciones después de que, a principios de semana, el presidente estadounidense, Barack Obama, propusiera reducir el arsenal nuclear de Rusia y Estados Unidas a un tercio del límite impuesto por el tratado bilateral START III o Nuevo START (Tratado de Reducción de Armas Estratégicas) de 2010.

Dicho tratado limita el despliegue de cabezas nucleares a 1.500 por país. Según el ministro ruso, avanzar más allá del tratado START hará que los arsenales nucleares de Rusia y Estados Unidos sean comparables a los de otros países que poseen armas nucleares.

Además de Estados Unidos y Rusia, la lista de potencias nucleares confirmadas incluye a Reino Unido, Francia, India, Pakistán y Corea del Norte. Israel es acusado de poseer este tipo de armas y se cree que Irán está intentando de desarrollarlas, aunque en ambos casos no está confirmado oficialmente.

La Federación de Científicos Americanos estima que el número de armas atómicas que poseen las potencias nucleares, excluyendo a Estados Unidos y Rusia, oscila entre las 100 y las 300 por país.

Lavrov ha afirmado también que Rusia tendrá en cuenta los planes estadounidenses para la construcción de un escudo de misiles de defensa en Europa a la hora de tomar cualquier decisión sobre una reducción mayor del número de armas nucleares, ya que los tratados bilaterales limitan el número de sistemas antimisiles. Lavrov ha revelado que Obama ha reconocido la "necesidad" de esta aproximación.

Durante varios años, Rusia se ha opuesto a los planes para la creación de un escudo de misiles en Europa por considerar que podría afectar a la paridad estratégica existente entre los dos antiguos enemigos de la Guerra Fría.