"La gente fuera empezó a llorar y a gritar" Lo cuenta Ana, que presenció el derrumbe. El supermercado se vinó abajo a última hora del tarde en un suburbio de Riga. Los clientes sufrieron un primer desplome parcial del techo, que podría estar relacionado con las obras de jardinería que se realizaban en la cubierta. Fue, sin embargo, el segundo desplome, unos 20 minutos después, el que sepultó a todos los presentes, entre ellos varios bomberos. Algunos han sido rescatados, pero los intentos por reanimarlos han sido vanos...La víctimas mortales ascienden a 45. Decenas, los heridos. Pero buscan supervivientes. Algunos han llamado con sus móviles. Es la esperanza de este hombre que no sabe nada de su esposa. Decenas de familiares angustiados han visto amanecer a pocos metros de la frenética actividad de los equipos de rescate.