La situación se ha ido de las manos. En plenas fiestas de mayo, los prorrusos y ucranianos llevan horas enfrentándose en las calles de Odesa.Los separatistas se han refugiado en una sede sindical convertida en albergue improvisado de los prorrusos. Los nacionalistas ucranianos les increpan y les comienzan a lanzar cócteles molotov.