En una gala para recaudar fondos para la organización Human Rights Campaign, un grupo estadounidense LGBT, la actriz recalcó que preferiría quedarse en casa "llenando el lavavajillas" en lugar de hablar en un acto político pero que "el peso de todos esos honores" que ha recibido en su carrera le obligan a hablar, informa Fox News.
"Es aterrador tener una diana en la frente", dijo. "Te hace susceptible a todo tipo de ataques, de los ejércitos de botas y camisas pardas, o peor, y la única manera de hacerlo es si sientes que tienes que hacerlo. ¡Pues tenemos que hacerlo! No hay otra opción".
La actriz condenó los métodos políticos de Trump y su "instinto catastrófico para tomar represalias", asegurando que su país ya se ha dado cuenta de "cómo la autoridad ejecutiva en las manos de un hombre de negocios puede ser ejercida contra la gente, la Constitución y la Carta de Derechos". Además, Streep subrayó que "si sobrevivimos a este momento precario, si su instinto catastrófico de represalia no nos lleva al invierno nuclear" los estadounidenses tendrán "mucho que agradecerle a este presidente" porque "él nos hará entender lo frágil que es realmente la libertad".
"Como estadounidenses, hombres, mujeres, personas, homosexuales, heterosexuales, LGTB. Todos tenemos el derecho humano a la vida, a la libertad y a la búsqueda de la felicidad", exclamó la actriz. "No vamos a volver a los viejos malos tiempos de ignorancia y opresión, y a esconder quiénes somos", añadió Streep. "Se lo debemos a las personas que han muerto por nuestros derechos, y que han muerto antes incluso de que obtuviesen el suyo propio".