Tres militares del Ejército turco han fallecido este lunes después de que supuestos guerrilleros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) abriesen fuego contra un convoy militar en la zona este de Turquía, han indicado fuentes de los servicios de seguridad.
El ataque se produjo cuando los militares circulaban por Bascale, en la provincia de Van. Algunos medios de comunicación informan de que en este asalto, ocurrido en la zona montañosa cercana a Irán, también han sufrido heridas una autoridad de distrito y su guardaespaldas.
EL PKK puso fin en febrero a seis meses de tregua y emplazó a sus miembros a adoptar una "defensa activa" que, en resumidas cuentas, consiste en atacar si son atacados.
En las últimas semanas, las autoridades turcas han atribuido a esta guerrilla varias acciones delictivas, incluidos secuestros. Más de 40.000 personas han muerto durante la insurgencia que se prolonga ya durante 27 años.
El líder del PKK, Abdulá Ocalan, que se encuentra detenido, comunicó el mes pasado a través de sus abogados que había acordado con las autoridades turcas la creación de un "consejo de paz" para resolver el conflicto, si bien dicha iniciativa no ha recibido ninguna valoración posterior.