Las autoridades han enviado a dos médicos este viernes a las localidades de Thanjolama, en Lahe, la primera área donde se han registrado víctimas de la enfermedad. Thein Zaw, el director adjunto de la zona, de autoadministración, ha indicado que las víctimas presentan, en un principio, tos, para luego desarrollar manchas oscuras en la piel y bultos por el cuerpo.
En las etapas finales, las víctimas terminan vomitando sangre. "Por el momento podemos decir que somos capaces de controlar un poco la situación con respecto a la enfermedad", ha afirmado Zaw. No obstante, el balance de muertos ya ha llegado a 38, de los que 34 son niños menores de 15 años.
Varias muestras de sangre y orina se están enviando a Rangún para valorarlas, si bien aún se desconoce qué tipo de enfermedad es la que está afectando a las ciudades de Lahe y Nanyún. "No podremos saber de qué tipo de enfermedad se trata hasta dentro de 10 ó 15 días", ha añadido.
Las autoridades no tienen aún previsto declarar el estado de emergencia, aunque han enviado más médicos para administrar tratamiento a los enfermos. En Lahe todavía hay entre 20 y 30 pacientes enfermos, y algunos más en Nanyún, aunque esta última cifra aún no se conoce.