El Consejo Constitucional estimó el pasado viernes que no se debían celebrar las elecciones a causa del estado de emergencia impuesto en Zhanaozen, una ciudad inmersa desde hace meses en un conflicto laboral protagonizado por los trabajadores del sector petrolero. A causa de esta cancelación, alrededor de 50.000 votantes potenciales se iban a quedar sin participar en los comicios.
"El presidente de Kazajistán ha tenido en cuenta la inquietud y la preocupación de los vecinos de Zhanaozen por la limitación de sus derechos electorales que se derivaba de la decisión del Consejo Constitucional", indicó la Presidencia en un comunicado.
"El único objetivo de la decisión del jefe del Estado es dar la oportunidad a los habitantes de Zhanaozen de satisfacer su derecho constitucional al voto y a ser elegios para los consejos gubernamentales y locales", agregó.
Nursultan Nazarbayev, que consiguió su reelección en las elecciones de abril de 2011 con el 96 por ciento de las papeletas, ha defendido la necesidad de crear un "Parlamento multipartidista" en el que pueda entrar un segundo partido, aunque no cumpla el porcentaje mínimo legal, establecido en el siete por ciento.
A pesar de que se espera que el partido Nur Ontan, que encabeza Nazarbayev, gane las elecciones por un amplio margen, los siete meses de protestas en varias ciudades petroleras y los enfrentamientos en Zhanaozen han minado la confianza de la gente en el Gobierno.
LOS ENFRENTAMIENTOS
Los enfrentamientos en Zhanaozen se produjeron un día después de una revuelta en la localidad cercana de Shetpe, en la que falleció una persona. Más de cien personas resultaron heridos y las protestas pacíficas se extendieron a la capital de la región, Aktau, durante varios días.
En respuesta a los levantamientos, Nazarbayev retiró de la dirección del Tesoro a su hijastro y cesó tanto a los principales directivos de la compañía petrolera estatal KazMunaiGas como al gobernador de la región de Mangistau.