La ONU ha asegurado que la Administración Civil, la agencia del ministerio de Defensa responsable del territorio, ha ordenado la demolición de 41 estructuras en la zona, bajo control militar y civil de Israel, tal y como recoge el diario israelí 'Jerusalem Post'.
Según la UNOCHA, las demoliciones han dejado a 36 personas sin casa, entre ellas, once niños. "Doce de las estructuras que han sido demolidas había sido suministradas por la Autoridad Palestina y la Media Luna Roja palestina como asistencia humanitaria", ha denunciado la agencia. "Una de ellas era un edificio que había servido como escuela elemental para nueve estudiantes", ha añadido.
"Jirbet Tana es el hogar de unas 250 personas que dependen de la ganadería y la agricultura para sobrevivir", ha añadido la agencia. "Debido a que los residentes de Jirbet Tana necesitan pastos para su ganado, la mayoría no han tenido más opción que quedarse en la zona. Ya que la ubicación de la comunidad se ha declarado como 'zona de fuego' para propósitos de entrenamiento, a los residentes se les han denegado los permisos de edificación y han experimentado repetidas olas de demoliciones, la última de ellas el 9 de febrero", ha denunciado.