El Ministerio de Inmigración y Desplazamientos de Irak ha anunciado este sábado en un comunicado que "el número de desplazados ha excedido los 550.000", entre los que se encuentran unas 320.000 personas del oeste de Mosul, la zona de la ciudad en la que aún tiene presencia el grupo yihadista.
Todos los desplazados han sido distribuidos en diferentes campos ubicados en el sur y este de la ciudad. "Un total de 98.444 refugiados han sido trasladados a los campamentos de Al Jazer, Hasán Sham y Jamour, en Erbil, y al de Debaga, en Majmur, en el área de Mosul", ha señalado el ministro, Jasse al Jaff, en un comunicado recogido por el portal Iraqi News.
"Otros 180.407 residentes han recibido albergue en los campamentos de Al Jadaa, Al Haj Alí, Al Madraj y Hamam al Alil --junto a este último, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha levantado esta misma semana un segundo campamento, ante el incesante flujo de desplazados--", ha agregado.
Asimismo, en los campamentos de Duhok en Al Narkezliya y Qaymawa hay 15.511 personas", ha continuado. El ministro ha subrayado los esfuerzos llevados a cabo por el Gobierno para suministrar refugio, alimentos y medicinas a todos los desplazados.
A finales de enero, el Ejército de Irak anunció la toma de todos los barrios de Mosul ubicados al este del río Tigris, si bien los yihadistas siguen controlando la zona occidental de la ciudad.
El primer ministro de Irak, Haider al Abadi, ordenó el 19 de febrero el reinicio de la ofensiva contra los yihadistas en el oeste de la ciudad, pidiendo a sus tropas que "respeten los Derechos Humanos".
Los milicianos yihadistas están prácticamente rodeados en la parte occidental de Mosul, después de la toma de la parte oriental de la ciudad el pasado mes de enero tras más de tres meses de combates.