La OTAN no cree que Libia se convierta en la nueva Somalia

EUROPA PRESS 24/10/2011 15:33

"Hay muchas armas. Estoy muy confiado en que muy pocas, si alguna, ha salido por aire y mar (...) Seguimos garantizando que tales armas no se trasladan por mar y aire, pero la situación sobre el terreno seguirá siendo competencia de las autoridades libias para impedirlo", ha insistido en rueda de prensa desde el cuartel general de la operación en Nápoles.

Aunque Bouchard ha admitido que los vecinos de Libia "no necesariamente son los más cooperativos" para impedir la salida "ilegal" de armas, sin citar a ninguno en concreto, ha dejado claro que "cuentan con que el Consejo Nacional de Transición (CNT) establezca lo antes posible la seguridad en las zonas fronterizas" con el objetivo de "minimizar" este riesgo.

"Las fuerzas de Policía comienzan a crearse, ha comenzado el primer curso para reclutar en el Ejército y hay estructuras de mando y control", ha precisado el teniente general canadiense, para justificar su optimismo.

Además, el militar ha rechazado todo paralelismo con la situación en Somalia. "No estoy de acuerdo. Aquí existen infraestructuras, (el país) tiene capacidades de tener ingresos, hay mucho potencial en este país más allá del petróleo y tenemos a gente que quiere la paz, estabilidad y prosperidad. Con esta combinación, no creo que sea apropiado comparar", ha explicado, preguntado por el riesgo de una guerra tribal entre facciones una vez que la OTAN ponga fin a su misión en Libia el próximo el 31 de octubre.

Bouchard ha dejado claro que el CNT "tiene las capacidades" para poder encarar la posible resistencia de remanentes "individuales" del régimen de Muamar Gadafi por sí solos y que tras la toma por las fuerzas rebeldes de los últimos bastiones del régimen en Sirte y Bani Walid los aliados consideran "bastante apropiado terminar la misión".

"Consideramos que Libia está liberada", ha insistido. "Quieren una Libia unificada. Han estado unidos en su objetivo de libertad, estoy convencido de que lo lograrán", ha agregado.

FIN DE LA MISIÓN, NO SE PREJUZGA

La portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, ha avanzado que los Veintiocho aliados tomarán "en los próximos días la decisión formal" de poner fin a la misión militar en Libia, para lo que el secretario general aliado, Anders Fogh Rasmussen, permanece "en consulta estrecha" tanto con la ONU como con las autoridades libias. "Estamos muy cerca de completarla", ha recalcado la portavoz.

Los países de la OTAN y los socios de la región que como Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Jordania han participado en la operación acordaron este viernes de manera "preliminar" poner fin a la misión el 31 de octubre y reducir los medios de la operación en este periodo de transición, en la que sin embargo mantendrá la capacidad de intervenir en caso necesario. Reino Unido defendió sin embargo mantener "más tiempo" la misión, según fuentes aliadas.

"La decisión es que debe acabar el 31 de octubre. La decisión formal tiene que tomarla el NAC en los próximos días. Es una decisión política y no prejuzgaré la decisión. Es una operación muy compleja (...) No se puede impulsar y terminar con un botón. Lleva algo de tiempo", ha explicado Lungescu, que ha rechazado, como ya hizo el viernes Rasmussen, que la OTAN mantenga tropas en países vecinos de Libia.

"Espero sus instrucciones esta semana", ha explicado Bouchard, que sin embargo ha insistido en que "la amenaza es tal que puede ser abordada por las fuerzas del CNT" porque "los remanentes del régimen no tienen una capacidad que condujera a la vuelta del régimen". "Las amenazas de ataques ordinarios contra la población civil han cesado", ha recalcado. "Desde nuestra perspectiva los objetivos asignados a Protector Unificado se han cumplido", ha concluido.

Bouchard ha admitido su "sorpresa" de saber que Muamar Gadafi viajaba en el convoy atacado dos veces por las fuerzas de la OTAN en Sirte el pasado jueves pero ha dejado claro que "algunos" de los vehículos que formaban parte del convoy transportaban "cohetes y ametralladoras", lo que representaba "una amenaza potencial clara contra la población".

En este sentido, ha insistido en la "preocupación" que existía de que "las fuerzas de Sirte se sumaran a las fuerzas de Bani Walid", para reagrupar a las fuerzas del régimen. "No teníamos ni idea de que Gadafi estaba dentro. De hecho me sorprendió que Gadafi estuviera todavía en Sirte", ha concluido.