De Wuhan a Europa: la ruta maldita del COVID-19 que deja 110.000 fallecidos en la UE

  • Italia está a la cabeza en el número de fallecidos y España, en el de contagios de coronavirus

  • Europa suma más de la mitad de muertos por COVID-19 en el mundo

La pandemia de coronavirus que se originó en la ciudad china de Wuhan mata cada día a más de 2.000 personas en Europa. Un continente que ya ha superado la barrera de los 110.000 fallecidos: dos tercios de los muertos en todo el mundo. Los países más afectados son Italia (25.085), España (21.717), Francia (21.340), Reino Unido (18.100) y Bélgica (6.262) aunque este país es, según las estadísticas, el que más muertes tiene por millón de habitantes desde que estalló el brote. ¿Pero cuando comenzó realmente?

En Europa, los primeros casos de contagio del COVID-19 se diagnosticaron el 24 de enero, según la prestigiosa revista médica The Lancet. Cinco pacientes, todos de una misma familia, ingresados en dos hospitales de París y Burdeos. Los pacientes eran tres hombres (de 31, 48 y 80 años) y dos mujeres (de 30 y 46 años), todos de origen chino, que regresaron a Francia a mediados de enero. El hombre de 80 años falleció el día 14 de febrero por la enfermedad; todos los demás fueron dados de alta cinco días después.

Italia, en busca del paciente cero

No fue hasta el 30 de enero cuando Italia confirmó los dos primeros casos de coronavirus, dos turistas chinos que estaban alojados en un hotel de Roma. El país se convirtió en el brote de coronavirus en Europa. El italiano Mattia Maestri, vecino de Codogno y de 38 años, es considerado el paciente uno, el primer contagio de humano a humano. El 21 de febrero ingresó en un hospital de la región de Lombardía, la más castigada, y estuvo un mes en coma hasta que finalmente se recuperó. ¿Cómo se infectó? Al principio los médicos creyeron que a Maestri le infectó un colega que había regresado recientemente de un viaje de negocios en China. Sin embargo, el hombre dio negativo.

Un equipo de científicos en Milán, en busca del paciente cero, aseguraron después que el coronavirus pudo llegar al país por Alemania y no directamente de China y que el brote italiano comenzó mucho antes del caso de Maestri: entre el 25 y el 26 de enero. Según ese estudio, la secuencia genética del virus en Italia era similar a un caso que surgió en Alemania a finales de enero: un hombre residente en Múnich que se contagió de alguien que vino de Shángai (China).

En España no existió el paciente cero

Italia está a la cabeza en el número de fallecidos pero España, en el de contagios de coronavirus. En Europa, la cifra total de positivos supera el millón cien mil: los más afectados, España (208.389), Italia (187.327), Alemania (148.046), Reino Unido (133.495) y Francia (119.151). En nuestro país, un estudio realizado por investigadores del Instituto de Salud Carlos III de Madrid ha revelado que el paciente cero en España nunca llegó a existir; el virus pudo entrar en nuestro país por varias vías y antes: a mediados de febrero y no en marzo.

Ischgl: el foco del brote en el norte de Europa

En Reino Unido, el primer caso documentado de transmisión de coronavirus fue el 28 de febrero, aunque las autoridades británicas no descartan que el COVID-19 entrara en el país un mes antes. El domingo 19 de enero, Daren Bland, de 50 años y vecino de Sussex, comenzó a sentirse mal tras volver de un viaje de esquí en la exclusiva estación de Ischgl, en Austria. Tenía todos los síntomas, aunque no se le hizo la prueba.

Pero las autoridades austriacas investigan si en esta estación, conocida como la Ibiza de los Alpes, y que acaba de reabrir sus puertas, ocultó un supuesto brote que propagó el COVID-19 a Alemania, Noruega, Suecia, Islandia y Dinamarca. Ischgl permaneció abierta una semana después de que se confirmase el primer caso. Unas 5.000 personas han presentado una demanda colectiva contra las autoridades de la región del Tirol por supuesta negligencia.

55.000 fallecidos en residencias

Durante la pandemia, más de la mitad de las 110.000 muertes por COVID-19 en Europa son personas que vivían en residencias para mayores, según ha confirmado la Organización Mundial de la Salud. Una "tragedia humana inimaginable" que en el futuro podría evitarse con sensibles mejoras en ese tipo de centros, aseguran. Más de 55.000 personas sin contar Reino Unido. El Gobierno británico solo cuenta en sus cifras oficiales los fallecimientos en hospitales y no en los centro de mayores.