Francisco: "Somos mundanos cuando caminamos y edificamos sin la Cruz"

Informativos Telecinco/Agencias 14/03/2013 22:16

De forma didáctica y sin dejar de gesticular con sus brazos, el nuevo Papa se ha detenido en el elemento común de las dos lecturas y el evangelio: El movimiento en el camino, en la edificación de la Iglesia y en la confesión. "Caminar, edificar, confesar", ha remarcado.

Así, ha comenzado explicando que el Señor invita a caminar en su presencia y ha recordado que "la vida es un camino y cuando se para, la cosa no funciona". "Quando ci fermiamo la cosa non va", ha indicado en italiano, idioma en el que ha pronunciado toda la homilía.

Además, ha subrayado que hay que "edificar la Iglesia, la esposa de Cristo sobre la piedra angular", no como los castillos de arena que hacen los niños que se derrumban fácilmente. Y confesar. "Podemos caminar y edificar todo lo que queramos pero si no confesamos ante Jesucristo, la cosa no funciona", ha añadido, al tiempo que ha subrayado que "quien no reza al Señor, reza a la mundanidad del diablo, al demonio".

Relaciones con los judíos

El papa Francisco ha tomado ya las riendas de su pontificado. En uno de sus primeros actos conocidos, se ha dirigido por carta al Rabino Capo de Roma para invitarle a su misa de entronización que tendrá lugar el próximo martes 19 a las 9:30 horas.

En la misma, el sumo pontífice le asegura que espera "vivamente" poder contribuir al progreso de las relaciones con los judíos que avanzan desde el Concilio Vaticano II. Con espíritu de renovada colaboración y al servicio de un mundo que pueda estar siempre y cada vez más en armonía con la voluntad de Dios", indica en la misiva, que firma como 'Franciscus PP.'.

Críticas por su actitud ante la dictadura argentina

El papa Francisco ha sido recibido con amplios elogios por la comunidad católica internacional. Pero ya han surgido las primeras voces críticas por algunos epiodios de su pasado al frente de la Iglesia argentina.

El más destaco ha sido su presunta colaboración con la dictadura que sufrió su país entre 1976 y 1983.

Contra estas críticas ya han surgido voces que le exculpan. La más importante, la del premio Nobel de la Paz, Alfonso Pérez Esquivel quien en declaraciones a BBC Mundo, ha negado que tuviera vínculos con la dictadura argentina, aunque sí ha denunciado que "le faltó coraje" para acompañar su lucha por los Derechos Humanos.