A 9 días de la fecha límite, el parlamento británico rechaza votar el plan de Johnson para el Brexit

  • Este fin de semana, las calles se llenaron pidiendo un nuevo referéndum

  • La prórroga no es automática, debe aprobarla la Unión Europea

A nueve días de la fecha límite para el brexit, el 31 de octubre, Bruselas ya se plantea una nueva prórroga. Ayer el parlamento británico volvía a dinamitar las intenciones de Boris Johnson

"Mi decisión es que la moción no se debata hoy". Eran las palabras del presidente de la Cámara de los Comunes, que suponen un auténtico jarro de agua fría para Boris Johnson. Sus sonrisas del jueves con los líderes de la Unión Europea se han congelado solo en cuestión de días.

En la calle se ha pedido como nunca este fin de semana un segundo referéndum sobre el Brexit. Y el Parlamento ahora no está dispuesto a votar su acuerdo de salida de la Unión Europea. No al menos hasta que se apruebe en la Cámara toda la legislación vinculada a ese acuerdo. Algo que podría retrasarse más allá del 31 de octubre.

La prórroga no es automática, debe aprobarla la Unión Europea. Johnson no la quiere -recordemos que dijo que preferiría estar muerto en una zanja- pero la pregunta es hasta dónde está dispuesto a llegar si el Parlamento no vota su acuerdo.

El 31 de octubre se acerca y sigue sin vislumbrarse un desenlace. Como dijo este fin de semana, la ex primera ministra Theresa May una sensación de "déjà vu" se apodera del ambiente.