Por si esto fuera poco, Joshua volverá a ser intervenido quirúrgicamente antes de que pueda regresar a su casa.
Su madre, Lisa Mann, de 23 años, habló el asombro que le produjo ver a su hijo ensangrentado en el hospital. "Pensé que iba a morir", dijo.
El ataque tuvo lugar el sábado pasado, cuando Joshua estaba en la granja de sus abuelos en Andoversford (Inglaterra), cerca de Cheltenham.
Joshua estaba acariciando al perro cuando éste saltó y le mordió la cara. Su padre y todos los presentes fueron corriendo para alejar al can del menor.
Joshua fue llevado al hospital de Gloucestershire, donde le sometieron a dos operaciones para reparar el daño a la cara.
"Se podría ver a través de la mejilla sus dientes, el corte fue hasta el interior de su boca. "Él tiene cicatrices por toda la espalda, la nuca y detrás de la oreja", dijo su madre.
El perro, de raza Collie, ha sido sacrificado. Al no ser considerado como uno de los 'potencialmente peligrosos', Lisa Mann ha querido hacer un llamamiento para todas aquellas personas que tengan mascotas, asegurando que "si no están bien educados, cualquier animal puede resultar peligroso".