Según las informaciones facilitadas por la cadena de televisión británica BBC, unos 200 milicianos atacaron las posiciones de las fuerzas kurdas en tres localidades ubicadas cerca de Majmur y Guer.
Los combates, que se han extendido durante varias horas, se han saldado con la muerte de "decenas" de yihadistas, según fuentes oficiales kurdas, que no han dado más detalles al respecto.
Estas fuentes han indicado que los peshmerga han recibido apoyo de la aviación de la coalición internacional contra el Estado Islámico, que ha llevado a cabo más de 1.200 bombardeos en Irak desde el inicio de sus operaciones en agosto.
Los kurdos han recuperado parte de los territorios que cayeron en manos de los yihadistas durante su ofensiva en verano de 2014 y se encuentran ya en los alrededores de Mosul, en medio de los preparativos del Ejército iraquí para intentar arrebatar la ciudad al grupo.
Por otra parte, el presidente del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, ha subrayado este mismo miércoles que la localidad de Kirkuk forma parte de su territorio y que "nunca caerá nuevamente en manos del enemigo".
"Kirkuk es tan importante para el enemigo como para nosotros. Es importante para ellos en términos morales y políticos, pero deben saber que o morimos todos, o nunca caerá en sus manos", ha prometido, según ha informado la cadena de televisión kurda Rudaw.
Los peshmerga se hicieron con el control de Kirkuk tras la ofensiva relámpago del Estado Islámico en junio de 2014 y ha reforzado sus posiciones para evitar que vuelva a caer en manos de los yihadistas.
La localidad, uno de los centros petroleros del país, es considerada como la capital cultural de kurdos y turkmenos, si bien cuenta además con una importante presencia árabe. Las autoridades kurdas abogan por que sea la futura capital de su estado independiente.