La Policía checa desactivó este viernes un paquete bomba que había sido localizado en un almacén de muebles de la empresa IKEA en Praga, según informaron fuentes policiales.
En un comunicado, la Policía indicó que había ordenado el cierre temporal de los cuatro almacenes de que dispone la empresa sueca en el país por motivos de seguridad.
La Policía no dio detalles sobre los posibles responsables de la colocación de la bomba ni sobre la forma en que fue hallado el paquete explosivo. La página informativa de Internet checa www.ihned.cz ha precisado que el paquete fue localizado por los servicios de limpieza en un cubo de basura situado en el exterior del almacén.
"Dada la situación de seguridad de los últimos años, hemos informado a nuestros socios extranjeros sobre las medidas preventivas", añadió la Policía. El pasado mes de mayo se registró la explosión de bombas de escasa potencia en otros almacenes de IKEA en Países Bajos, Bélgica y Francia, que no causaron heridos graves.
Dos ciudadanos polacos fueron encarcelados en 2004 por colocar, en 2002, bombas en dos almacenes de IKEA en Países Bajos y por exigir a la empresa el pago de 250.000 euros. IKEA pertenece a una fundación controlada por el empresario sueco Ingvar Kamprad.