El presidente de Túnez abandona el país y el ejército toma el poder

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 14/01/2011 12:59

Poco antes del anuncio de Ghannouchi, las cadenas de televisión Al Yazira y Al Arabiya aseguraron que el presidente del Parlamento, Fuad Mbazaa, había asumido el poder por un periodo mínimo de 60 días. Mbazaa presidirá un comité de gobierno.

El presidente del Parlamento de Túnez, Fuad Mbazaa, ha tomado el poder por un periodo mínimo de 60 días, según informó la cadena de televisión Al Arabiya.

Francia ya ha recibido la órden de recibir al presidente de Túnez, Zine al Abidine Ben, quien viaja al país galo tras abandonar su país.

Ante esta situación, el Gobierno de Túnez ha declarado el estado de excepción en todo el país, ha impuesto un toque de queda entre las cinco de la tarde y las siete de la mañana, según informó la televisión estatal. Asimismo, ha prohibido la formación de grupos de más de tres personas y advertido de que "se utilizarán las armas" si no se atiende a las órdenes de las fuerzas de seguridad.

"El presidente ha ordenado al primer ministro, Mohamed Ghannouchi, la formación de un nuevo Gobierno", informó la televisión. "Tras los actos de violencia, ha decidido introducir el estado de excepción en el país para proteger a los ciudadanos tunecinos", prosiguió.

"Este estado de excepción supone que queda prohibida cualquier reunión de más de tres personas, que las fuerzas de seguridad utilizarán las armas en caso de que los sospechosos no se detengan cuando se lo pida la Policía y que se impondrá un toque de queda desde las cinco de la tarde hasta las siete de la mañana por un periodo indefinido", añadió.

El presidente de Túnez, Zine al Abidine Ben Ali, decidió destituir a todo su Gobierno y convocar elecciones legislativas para dentro de seis meses, después de varias semanas de protestas populares contra la corrupción, el paro y los altos precios de los alimentos.

Las movilizaciones alcanzaron su punto culminante este viernes con una manifestación de miles de personas ante la sede del Ministerio del Interior para reclamar la dimisión inmediata del presidente, pese a que éste se había mostrado dispuesto a celebrar elecciones legislativas antes de las presidenciales de 2014 y a no cambiar la Constitución para poder optar a la reelección. La Policía ha disparado gases lacrimógenos y se han escuchado disparos.

Según las organizaciones de Derechos Humanos, al menos 60 personas han muerto a lo largo de estas últimas semanas a causa de las protestas registradas en todo el país. Trece de ellas murieron esta pasada noche en la capital, Túnez, y otras cinco fallecieron este viernes en las afueras de la ciudad.

En un discurso retransmitido el jueves por la televisión estatal, Ben Alí se comprometió a acometer "profundos cambios" políticos y económicos en el paí , incluida la celebración de unas elecciones presidenciales "pluralistas en las que se garantice la alternancia".

Disuelven la manifestación con gases lacrimógenos

Las fuerzas policiales decidieron disolvieron con gases lacrimógenos a los miles de manifestantes congregados este viernes que exigían la salida del poder del presidente.

Muchos manifestantes se habían sentado en las calles y aseguraban que no pensaban abandonar el lugar hasta conseguir la salida del poder de Ben Alí.

En un momento dado y cuando algunos jóvenes intentaban encaramarse a las ventanas del edifico que alberga al departamento de Interior, las fuerzas antidisturbios comenzaron a disparar proyectiles de gases lacrimógenos contra los manifestantes.

Los congregados comenzaron a huir despavoridos en todas direcciones y la céntrica avenida Habib Burguiba donde se encuentra la sede de Interior, comenzó a llenarse de un humo irrespirable.

Un grupo de jóvenes al salir en estampida empezaron a tirar piedras contra los coches ante la puerta del Ministerio de Turismo situado justo enfrente del de Interior, pero fueron dispersados enseguida por los efectivos policiales.

Decenas de fuerzas especiales antidisturbios se encuentran en estos momentos desplegadas en la avenida Burguiba y furgonetas policiales circulan rápidamente de un lado a otro. La concentración ha quedado totalmente disuelta. RSO