El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, comunicó una nueva orden a sus soldados y les animó a "no matar" a las mujeres a las que se enfrenten. "Solo os vamos a disparar en la vagina. Sin la vagina son inútiles", afirmó Duterte en su intervención del pasado 7 de febrero en Malacañang, según la transcripción oficial del discurso. La reproducción censura la palabra vagina, pero los medios filipinos han confirmado que la pronunció.
Las reacciones a estas palabras no se han hecho esperar en el propio país y la portavoz en Manila del partido femenino Gabriela -con dos escaños en el Parlamento-, Emmi De Jesús, ha denunciado que estas declaraciones "confirman que (Duterte) es el más peligroso macho-fascista del Gobierno".
Esta declaración "es solo la última de toda una serie de declaraciones misóginas, despectivas y degradantes sobre las mujeres", ha denunciado por su parte Human Rights Watch. HRW ha añadido que, con su discurso, Duterte "anima a las fuerzas de seguridad a cometer delitos sexuales durante un conflicto armado, lo que supone una violación del Derecho Internacional Humanitario".
Un portavoz de Duterte, Harry Roque, ha reprochado a los críticos que no tengan sentido del humor: "A veces estas feministas exageran un poco. Es divertido. Venga, solo hay que reírse un poco", ha añadido.
En mayo de 2017, Duterte ya afirmó en tono jocoso que los soldados podían violar hasta a tres mujeres sin que se les castigara y unos meses después volvió a bromear con la violación de la ganadora del concurso de Miss Universo. El mes pasado afirmó que ofrecería 42 vírgenes a cada turista que visite el país.