"La OTAN apoya los esfuerzos de los pueblos egipcio y tunecino para el establecimiento de una sociedad libre y un gobierno democráticamente electo", manifestó en una entrevista que publica hoy el diario "Haaretz" y en la que dice que, de momento, no ve al Estado judío como miembro de la Alianza Atlántica.
El secretario general de la OTAN se reunió con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, cita tras la cual manifestó sus esperanza de incrementar la cooperación estratégica y en materia de inteligencia con Israel.
"Compartimos las mismas preocupaciones", manifestó en una rueda de prensa conjunta con Netanyahu celebrada esta tarde en Jerusalén, al referirse a la lucha antiterrorista, o amenazas como la nuclear o de ataques con misiles.
El jefe del Gobierno israelí agradeció a Rasmussen su apoyo y refirió que la cooperación con la OTAN es importante para Israel, especialmente, en momentos de gran incertidumbre en la región.
Por otra parte, Rasmussen, de 58 años y ex primer ministro danés, reiteró al diario las tres condiciones que la OTAN pone para una eventual intervención en el proceso de paz árabe-israelí.
Mencionó que debe haber un acuerdo de paz basado en la solución de dos estados, una solicitud por ambas partes para esa implicación, y un mandato de la ONU.
Sobre la posibilidad de que Israel eleve sus relaciones con la Alianza y se convierta en miembro de la misma, el representante de la OTAN recordó uno de los estatutos de la organización limita la afiliación a los países Europeos y Norteamericanos.