Desde hace dos días los combates se han intensificado con especial violencia en la zona de Brega, y según el balance facilitado por la cadena de televisión árabe Al Arabiya, al menos ochos rebeldes han muerto y otros 20 resultaron heridos solamente el sábado.
En el oeste, los misiles Grad y los obuses de carros de combate de las fuerzas de Gadafi han seguido hoy lloviendo sobre la ciudad de Misrata, asediada desde hace dos meses, causando seis muertos y cerca de 50 heridos.
Los rebeldes lanzaron el viernes una nueva ofensiva en la ciudad portuaria y petrolera de Brega, consiguiendo conquistar la zona este de la misma.
Durante dos días han acosado a los gadafistas con incesantes disparos de obuses, obligándoles a atrincherarse y a mantenerse en sus posiciones.
Pero hoy, la balanza se ha inclinado otra vez a favor de las tropas de Gadafi que han contraatacado tras haber recibido, al parecer, aprovisionamientos de armas y municiones.
Durante la mañana, los gadafistas han disparado misiles Grad y obuses de diferente calibre contra los rebeldes haciéndoles retroceder hasta la ciudad de Ajdabiya, en la última línea de defensa antes de Bengasi, su feudo.
Los bombardeos han sido tan intensos que los revolucionarios han tenido que abandonar sus posiciones en la entrada de la ciudad por el oeste y reagruparse en el centro de la misma.
En marzo pasado los rebeldes ya lanzaron una vasta ofensiva hacia el oeste, tomando el control sucesivamente de Ras Lanuf, Brega y Naufaliya.
El objetivo anunciado por los rebeldes era tomar Sirte, la ciudad natal de Gadafi y abrir una vía hacia la capital, Trípoli, pero perdieron terreno unos días más tarde y tuvieron que retroceder hasta su punto de partida.
Hoy, una vez más los jefes militares de los rebeldes han lamentado "la falta de eficacia" de las intervenciones de la OTAN pero también sobre todo la precariedad de su material de guerra, que les permita alcanzar sus objetivos.
Un opositor ha revelado en declaraciones a la cadena de televisión catarí Al Yazira que han pedido a la Alianza Atlántica que autorice a los rebeldes a utilizar los aviones de combate que han tomado desde el comienzo del conflicto en Libia para golpear a las posiciones gadafistas en Brega y poder avanzar, pero su petición ha sido rechazada.
El mismo miembro de la oposición libia ha explicado que los aviones de la OTAN tienen dificultades en Brega para bombardear las posiciones de las fuerzas del régimen de Gadafi porque están concentradas en cerca de estructuras económicas importantes, como fábricas, almacenes de carburantes y campos de petróleo.
Mientras los rebeldes del este parecen sufrir un nuevo fracaso, los del oeste han anunciado avances en su lucha contra las fuerzas de Gadafi en Misrata, pese a la persistencia de los ataques.
Un portavoz de los rebeldes ha afirmado en declaraciones a Al Jazira que los rebeldes han retomado el control de la avenida de Trípoli, la principal arteria del centro de Misrata y que en las últimas semanas estuvo controlada por francotiradores apostados en los tejados de los edificios.