Los rebeldes afirman que toda Trípoli está bajo su control a excepción del complejo de Bab Al Aziziya, donde se refugia el mandatario libio, Muamar Gadafi, según han indicado sus portavoces a la televisión panárabe Al Yazira.
Al parecer, los rebeldes controlan ya el aeropuerto de Trípoli, donde habrían aterrizado en las últimas horas dos aviones procedentes de Sudáfrica.
Por otra parte, esta misma cadena ha informado de que el sonido de los combates, en los que participan cientos de personas en las filas rebeldes, ha comenzado a escucharse en los alrededores de la residencia del mandatario libio.
En este contexto, miles de libios se han echado a las calles para celebrar la entrada de los rebeldes en la capital. La mítica Plaza Verde, escenario de los desfiles en honor a Gadafi, se ha convertido ahora en el principal centro de reunión.
Mientras, en Benghazi, sede del Consejo Nacional de Transición --órgano de gobierno de los rebeldes-- la población sigue en las calles el curso de los acontecimientos en Trípoli. A cada avance insurgente sigue una oleada de disparos al aire en señal de júbilo.